06/11/2021PIGAFETTA, 06-11-1521

Detrás de ambas, el miércoles 6 de noviembre, descubrimos cuatro de gran elevación, a catorce leguas. El piloto, que seguía en la nave, afirmó que aquellas cuatro eran Maluco, así que dimos gracias a Dios y, por júbilo, descargamos la artillería toda. No era para maravillar a nadie que nos sintiésemos tan alegres, porque habíamos consumido veintiseis meses menos dos días en encontrar Maluco. Por todas las islas anteriores a ella, el fondo menor que encontrábamos era a cien y doscientas brazas; lo contrario de lo que decían los portugueses, que aquí no se podía navegar por los grandes bancos y el cielo oscuro, según ellos lo suponían.