24/11/2021PIGAFETTA, 24-11-1521

Cada día llegaban de Tarenate muchas barcas con cargamentos de clavo; pero, como aguardábamos al rey, nuestras únicas compras eran víveres. Los de Tarenate se quejaban sonoramente, porque no queríamos tratar con ellos. En la noche del domingo, 24 de noviembre, en puertas el lunes ya, regresó el rey, sonando sus láminas al cruzar entre los dos barcos; le recibimos con salvas abundantes. Díjonos que, a los cuatro días, iba a llegar mucho clavo.